Escrirores en Red

miércoles, 10 de junio de 2015

LAS PALABRAS ME ARRASTRAN

     Las palabras me arrastran por sendas misteriosas, invitándome en cada rincón del tiempo a detener mis pasos y escribir unas letras sobre la cuartilla recelosa del recuerdo, da igual que sea un melancólico poema o un aventurero relato donde se mezclen las vivencias más extravagantes. Qué más da! El caso en sentirse vivo y poder brindar con las copas, tantas veces usadas, de los recuerdos, hay que impedir que el cristal del espejo se empañe y ya no podamos divisar el rostro risueño de la esperanza.

     Sorbo a sorbo, con esmero, hay que destilar las ilusiones diarias, porque la vida, en muchas ocasiones, es terriblemente dura y las palabras pueden asfixiarse en su propio bilis, entonces, ya nada tendrá sentido.

lunes, 8 de junio de 2015

EL PACTO DEL TIREL CONTUNÍA

     En las últimas elecciones Autonómicas y Municipales el Partido Popular, a pesar de haber ganado en número de votos, ha perdido o va a perder mucho poder, puesto que no ha sacado los votos suficientes que le permita mantener las mayorías absolutas que tenía, pues el ascenso de Podemos y Ciudadanos ha quitado una gran cantidad de votos tanto al Partido Popular, que repito ha ganado las elecciones, como al Partido Socialista, que sigue en caída libre y ha obtenido el peor resultado de su historia, aun así se creen los vencedores y los que van a cambiar las cosas, puesto que esperan contar con el apoyo de esos partidos emergentes. Es decir, el Parto de Tirel o el cordón sanitario impuesto por Zapatero continúa, ‘’Todos contra el PP’’.

martes, 2 de junio de 2015

EL TONO GRISÁCEO DEL PAPEL

     El tono grisáceo del papel, arrugado ya por el frío de la tarde trataba, por todos los medios posibles, de mantener la compostura. Ya era tarde, y no había nada que hacer. Era demasiado tarde. Los silencios, vestidos de blanco, ultrajaban a jóvenes doncellas, robándolas los atardeceres más hermosos de su corta existencia.

     El poeta contemplaba horrorizado la escena. Era incapaz de moverse, tampoco podía gritar. Su voz temblaba, desaparecía entre ecos moribundos que no llegaba a entender. No comprendía absolutamente nada. No podía esperar nada. Era absurdo, los versos morían en sus entrañas doloridas, maltratados por la espera de los días, por el suplicio de los años monótonos, por las ausencias.